Te encuentro de nuevo
en mi perdido escaparate
alborotado por el viento y la
tormenta
Siempre has existido allí
Entre las notas de Rachmaninov
Mozart y Beethoven
Sosteniendo la misma sonrisa
Y tu tierna mirada.
Me saludas como siempre
Como que nunca te has ido
Como que has permanecido
A la espera de un toque mágico
Que te dejo por hoy.
Música celestial tu entrada.
ResponderEliminarHola Aida, mejor compañía no podías tener, una gozada los tres.
ResponderEliminarBesos.
No podías dejarnos en mejor compañía.
ResponderEliminarEs que no se ha ido.
ResponderEliminarSeguro.
Besos.
Está en tus ojos, en tu corazón.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias,abrazos.
ResponderEliminarTierna mirada y hermosa sonrisa, que sigan presentes!
ResponderEliminarBesos!
Ese toque mágico nos llega a todos, Aida y vemos su sonrisa mientras escucha contigo la música...El siempre está ahí, esperándote en tu corazón.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, amiga.
M.Jesús
No dejes que te abandonen sus notas. Es muy bello lo que compuso para piano.
ResponderEliminarUn beso, Aída.
Será que le gusta ver cómo baila tu corazón con su compás...
ResponderEliminar;)
Besitos, mi Plumita.
Sigo sintiendo esa hermosa ternura,
ResponderEliminarNo la sueltes jamás
Y dejame seguir creyendo que es posible sentir "su música" y sonreír
Mi abrazo y como no, gracias....
El sentir como marea
ResponderEliminarVa y viene en ola
cual corazon tormentoso
mientras la vida sigue y sigue
...y en un descanso,
mi corazón se alza
y él en tu recuerdo,
miles de palomas vuelan...
Me quedo como seguidor.
EliminarBien venido es un gusto contarte entre mis amigos.
EliminarGracias por tu comentario.