Por correr en dirección opuesta
perdí la dirección exacta.
sucede que no
veo la puerta azul dónde me esperabas.
sucede que me canso de correr
y abrir todas las puertas azules
pero la tuya
no la encuentro
¿Será que fue pintada con azul más claro?
Ni aún la mariposa de filigrana
confeccionada con hilos de colores
que reposaba sobre el tocador dorado
aparece por ningún lado.
Tendré que retornar al punto de partida
y ese punto lo miro ¡tan distante!
No, no retornaré,
fabricaré otra puerta de color azul
y ocuparé tu sitio
La mariposa será sustituida
por dos bellos delfines
que reconocerás de inmediato,
tocarás la puerta
y abriré en seguida.
Tu poético transitar por distintos umbrales me llenó de variedad literaria y lírica y desde luego, yo también mi fijaría en dos delfines¡¡¡¡Muy bueno y prístino!!!!
ResponderEliminarMuy bueno, Aida. Hay que reinventar la vida cada día. Me gusta esa puerta azul y los delfines, magia y creatividad siempre.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y mi ánimo, compañera.
Preciosidad
ResponderEliminarMe identifico mucho con tus palabras.
ResponderEliminarHola Pluma Roja, me preocupa el que no sepamos más nada acerca de ti... por favor
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